Lo que parecía una interminable historia de horror culminó esta tarde. Jesús Ascuña Castillo logró recuperar la libertad, luego de permanecer más de un mes injustamente encarcelado en la prisión de Quencoro, en el Cusco.
"Jechu", como cariñosamente lo llaman sus amigos y familiares, fue recluido inexplicablemente de manera preventiva por la Corte de Justicia de la Ciudad Imperial, acusado de agredir y robar a Gregory Hinojosa García.
El testimonio y los argumentos de Hinojosa García se desbarataron como un castillo de naipes, desnudándose una descarada red de tráfico de influencias, manipulada por la familia del supuesto agredido.
El hecho concitó revuelo en medios capitalinos y gracias al peso de la verdad, el joven tacneño fue puesto en libertad esta tarde.
"A veces la justicia se deja llevar por influencias, pero estoy feliz por estar en la calle, con mi familia, quiero agradecer a mi familia y a toda la gente que se ha preocupado por mi en este tiempo", fueron sus primeras palabras.
"Voy a continuar con mi vida, esto me ha hecho pensar, meditar muchas cosas, en Tacna quiero disfrutar de estar afuera con mi familia y aprovechar para agradecer personalmente a cada una de las personas que me han apoyado… pero sobre todo a Dios", agregó.
"Jechu" y sus padres continuarán hasta mañana en Cusco, para culminar con algunos trámites judiciales, el Miércoles la familia Ascuña Castillo estará en Tacna. Sin embargo el proceso continuará, pues sólo se ha cambiado el mandato de detención preventiva por uno de comparecencia.
