Tomando una decisión desesperada ante la ola de protestas, paros y movilizaciones de los gremios sindicales y organizaciones sociales que se presenta en nuestro país, el ejecutivo dispuso a través del decreto supremo N° 060-2007 MD la presencia de las Fuerzas Armadas en las calles de todas las ciudades del Perú por espacio de 30 días; en respaldo a la Policía Nacional del Perú para velar el orden público y resguardo de instituciones públicas y privadas.
La información fue vertida por el gobernador de Tacna Víctor Raúl Urviola Hani tras señalar que la norma fue publicada en el diario oficial "El Peruano", donde se destaca entre sus dispositivos el apoyo que recibirán los efectivos policiales por parte del ejército peruano para garantizar la propiedad estatal y privada; siempre y cuando el Ministerio del Interior disponga el ingreso de los mismos.
Al ser consultado sobre una posible provocación de los militares hacia la población tacneña que ha dispuesto manifestaciones pacíficas para los subsiguientes días, la autoridad política en nuestra región llamo a la calma precisando que con este decreto no se restringe el libre tránsito de los ciudadanos ni se suspende los derechos fundamentales de las personas que se encuentran contemplados en la constitución política del Perú.
"La directiva que está elaborando el Ministerio de Defensa a través de su Comando Conjunto tendrá puntos claros al recalcar que la intervención de sus miembros sólo se hará efectivo siempre y cuando sea requerida por la policía Nacional y el Ministerio del Interior", manifestó.
Urviola Hani, remarcó además que las Fuerzas Armadas no sólo están autorizadas en intervenir sólo cuando se declare estado de emergencia a un distrito, provincia o región, sino también puede ir en procura de las fuerzas policiales cuando la situación lo amerite. Todo ello en procura de salvaguardar el orden y el normal funcionamiento de los servicios públicos.
De otro lado, se pronunció con respecto a la movilización que despliega el Frente Amplio de Defensa del Medio Ambiente, aseverando que la gobernación en el estricto cumplimiento de sus funciones y atribuciones que le confiere la carta magna, garantiza el estado de derecho manteniendo el orden público; por lo que invocó a la población tacneña desarrollar de manera pacífica su medida de protesta siendo respetuosos de la propiedad privada y pública.
Asimismo, recalcó que al no ser solicitado el permiso respectivo ni solicitado las garantías del caso, la gobernatura respetará las manifestaciones siempre y cuando no se altere el orden público. De lo contrario la policía nacional tendrá la orden de reprimir a los manifestantes.