Presentó su dimisión con una carta enviada al Congreso; asegura que es para «mantener la institucionalidad»; antes, le habían sacado los fueros y la Justicia pidió su captura
Renuncia el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina
El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, acusado de corrupción, renunció al cargo con el fin de «mantener la institucionalidad del Ejecutivo», informó hoy una fuente oficial.
Pérez Molina, el primer presidente desaforado de la historia del país, está acusado de liderar la red de corrupción aduanera «La Línea» y desde ayer miércoles pesa sobre él una orden de captura. El portavoz oficial de la Presidencia, Jorge Ortega, precisó a Efe que el presidente firmó la carta de renuncia a las 19:00 hora local del miércoles (01:00 GMT del jueves). El objetivo, aseguró, es «mantener la institucionalidad y el orden que corresponde dentro del Estado», además de enfrentar «de manera individual» el debido proceso en su contra.
El general retirado perdió su inmunidad y privilegios el martes tras el voto unánime de 132 diputados, después de que el Ministerio Público (MP) y la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG) lo acusaran el 21 de agosto de corrupción.
De acuerdo con la investigación de más de 18 meses de ambas entidades, Pérez Molina supuestamente dirigía la red clandestina dentro de la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), con la complicidad de al menos 28 personas, incluida la exvicepresidenta (2012-2015) Roxana Baldetti, en prisión desde el 21 de agosto.
El portavoz presidencial manifestó que la decisión de Pérez Molina «sí» fue difícil pero que, a pesar de ella, el presidente sigue defendiendo su inocencia. No obstante, agregó, el desarrollo de los eventos lo obligaron a tomar esta decisión. La carta de renuncia ya fue entregada al Congreso a las 23:58 hora local del miércoles (04:58 GMT del jueves) y, por la coyuntura política, el «escenario está claro» y esperan que el pleno la acepte.
El juez Miguel Ángel Gálvez, a cargo del Juzgado B de Mayor Riesgo, dictó ayer miércoles una orden de detención contra el mandatario. Ortega declaró que no sabe si este u otro fue el detonante para que Pérez Molina decidiera dejar el cargo.
El abogado personal del presidente, César Calderón, indicó ayer a Efe que para evitar que Pérez Molina sea llevado «a la fuerza» por las autoridades, acudirán de forma voluntaria ante el juzgado esta mañana, aunque no especificó la hora.
El mandatario, quien tomó posesión del cargo el 14 de enero de 2012, había reiterado desde que fue acusado que no iba a dimitir para garantizar la celebración de las elecciones generales del próximo domingo.
LA CARTA DE RENUNCIA
El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, presentó hoy su renuncia mediante una carta a la presidencia del Congreso de la República a la que tuvo acceso Efe y cuyo contenido integro es el siguiente:
«Señor Presidente:
Desde el inicio de mi carrera profesional y después política, he venido luchando por la democratización, la paz y el bienestar del pueblo de Guatemala.
En la situación actual y teniendo en cuenta sobre todo el interés del Estado, me corresponde continuar con el debido proceso y por lo tanto presentarme ante la justicia y dirimir mi situación personal; con la convicción de hacer lo correcto, me dirijo a usted y al honorable Congreso de la República para presentar mi renuncia al Cargo de Presidente de la República de Guatemala.
Con los principios y valores en los cuales me he formado, enfrentaré con la conciencia tranquila los procesos correspondan. Hoy más que nunca, mi compromiso con el pueblo de Guatemala es someterme con toda entereza, mediante el debido proceso, al imperio de la ley y desvirtuar los señalamientos que hoy se me hacen.
Hago un llamado a los guatemaltecos y guatemaltecas, para que dejando por un lado los odios y rencores, y en el marco del Estado de Derecho, contribuyamos todos, para hacer las transformaciones profundas que el Estado demanda, para enfrentar los grandes retos que procuren la construcción de nuestra Guatemala, que sea expresión de la Justicia, la Seguridad, la Paz y el Desarrollo, especialmente de los mas desposeídos.
Tengo la convicción y la fe en dios, que el futuro es promisorio, que nuestros tiempos han de venir, en los que habremos de escucharnos como Nación de la cual, la satisfacción de las necesidades y una vida digna para todos, sea una realidad.
Agradezco a la Iglesia Católica y a la Iglesia Evangélica por sus múltiples informaciones y a los millares de guatemaltecos que confiaron y siguen creyendo en que juntos habremos de construir una Guatemala mejor».
Fuente: Agencia EFE