Restaurante El Cacique mostró a los asistentes los secretos del plato bandera de Tacna.
Tradición tacneña en Mistura.
Natalia Soto Paria compatió los secretos del picante a la tacneña en el Salón Tradiciones de Mistura donde cocinó en vivo el plato que le fuera heredado por su madre, doña María Pari Choque, fundadora del restaurante El Cacique.
Ante el público repasó los ingredientes: cien gramos de pasta de ají, 200 gramos de papa sancochada, 500 gramos de mondongo de res, 50 gramos de chalona, 30 gramos de charqui, 70 mililitros de aceite, sal y orégano tacneño al gusto.
Mientras ella procedía con poner el ají a punto en la cocina, el público recibía una clase maestra sobre los ajíes por parte de la maestra Isabel Álvarez, fundadora de Apega y propietaria del restaurante El Señorío de Sulco. Mientras conversava con el público comentaba del heroismo y valor de la tierra tacneña y su gente.
Soto Paria resaltó la importancia que tiene para ella Mistura, inclusive recordó la edición del 2011 que para ella es una fecha significativa, pero también de mucho dolor. En aquella ocasión participaba por primera vez cocinando ante el público, pero también fue la fecha en la que murió su madre.
«Mi madre ya estaba enferma cuando vine a Mistura el 2011 a cocinar. Me cuentan que cuando vio el video de mi presencia en Mistura no pudo pronunciar palabra, pero a los pocos días se fue de entre nosotros. Yo creo que ella sabía que nuestra llegada a Mistura significaba que mi hermano y yo ya estábamos listos para manejar el restaurante y por eso partió tranquila», dice Natalia en un video como para darse valor.
Contó que Doña Pari Choque comenzó su restaurante en febrero de 1991 con sólo unas cuantas sillas, su mesa de comedor y la pizarra de sus hijos anunciando «Este fin de semana picante a la tacneña». Con mucho esfuerzo se hizo de clientes hasta que logró establecerse y formalizar su negocio bautizándolo como El Cacique, en honor a Abel Ara Girón y a su esposa Hilda Gil, los tacneños que la criaron como a una hija.
María Pari Choque ya no está, pero hay una tradición que cuidar. De eso sabe bien Natalia, quien pese a su juventud sigue adelante con la preparación del plato bandera de Tacna.
