El presidente de la Cámara baja de Brasil, Eduardo Cunha, declaró la sesión abierta en medio de gritos de los diputados.
Arrancó la votación crucial para el futuro de Dilma Rousseff en Brasil.Foto:EFE
La Cámara de Diputados de Brasil comenzó la votación en la que sus 513 miembros decidirán si el proceso que puede llevar a la destitución de la presidenta Dilma Rousseff avanza al Senado o termina en los archivos del Parlamento.
La votación, que pudiera durar unas cinco horas, será nominal y cada uno de los 513 diputados será llamado a manifestarse frente a un micrófono, de acuerdo con orden geográfico determinado por la latitud de los 27 estados de Brasil.
El presidente de la Cámara baja, Eduardo Cunha, declaró la sesión abierta «sobre la protección de Dios y en nombre del pueblo brasileño», en medio de gritos de «Fuera Dilma», coreados por los promotores del proceso, y del «no habrá golpe» del oficialismo.
Si el proceso avanza, el Senado deberá pronunciarse y decidir si acepta las acusaciones e instaura el juicio político.
En ese caso, Rousseff sería separada del poder durante 180 días, que sería el plazo que el Senado tendría para realizar el trámite que pudiera concluir con su destitución.
Durante ese período, el lugar de Rousseff sería ocupado por el vicepresidente Michel Temer, quien rompió sus relaciones con la mandataria y ha dedicado las últimas semanas a consultas sobre lo que sería su posible Gobierno, pues si se llega a la destitución le tocará completar el mandato que acaba el 1 de enero de 2019.
Calles divididas
Frente a la sede del Congreso se han concentrado decenas de miles de personas, tanto contrarios al proceso como favorables a una posible destitución de la mandataria.
La sede del Parlamento se sitúa en la céntrica Plaza de los Tres Poderes, frente al Palacio presidencial de Planalto y el edificio de la Corte Suprema, en uno de los extremos de la avenida Explanada de los Ministerios, donde se concentra todo el poder público nacional.