El Senado de Brasil ha decidido este miércoles seguir adelante con el juicio político contra la presidenta, Dilma Rousseff, suspendida desde mayo.
(AFP)
El Senado de Brasil ha decidido este miércoles seguir adelante con el juicio político contra la presidenta, Dilma Rousseff, suspendida desde mayo y la dejó a un solo paso de perder definitivamente su mandato.
Tras cerca de 17 horas de votaciones, la Cámara Alta brasileña ha aprobado con 59 votos a favor y 23 en contra, el informe por el que se acusa a Rouseff de presuntas irregularidades contables. La sentencia sería conocida a fin de mes.
La aprobación del informe, que acusa a la mandataria de graves irregularidades fiscales que llega a calificar de «atentado contra la Constitución», llevará a una nueva y última sesión del pleno del Senado, que deberá celebrarse a fines de este mismo mes.
En esa sesión, que será convocada por la Corte Suprema, Rousseff será despojada de su mandato si así lo decide una mayoría calificada de 54 votos entre 81 posibles, lo que supone las dos terceras partes del pleno del Senado.
Si se llega al extremo de la destitución, el mandato que acaba el 1 de enero de 2019 será completado por Michel Temer, quien como vicepresidente sustituye a Rousseff desde el pasado 12 de mayo, cuando fue suspendida de sus funciones para responder al proceso.