El grupo terrorista Sendero Luminoso asesinó a más de 69 personas que vivían en Ayacucho. Abimael Guzmán ordenó aniquilar a toda la población como una “sanción ejemplar” por haberse rebelador ante ellos. Miguel Jugo, coordinador de los Derechos Humanos, se expresó con dolor por lo ocurrido ese fatídico 3 de abril de 1983.
A 34 años de la masacre terrorista en Lucanamarca.
Un domingo 3 de abril del año 1983, el grupo terrorista Sendero Luminoso perpetró una de las más terribles masacres ocurridas en nuestro país. En aquel momento, los terroristas asesinaron a 69 personas que vivían en el distrito de Santiago de Lucanamarca, en Ayacucho.
El día de hoy se conmemora 34 años donde según el Informe Final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), la masacre fue hecha por 60 terroristas en las zonas de Yanaccollppa, Ataccara, Llacchua y Lucanamarca. Ellos estaban armados de machetes, cuchillos y armas de fuego bajo la orden de Abimael Guzmán. No obstante, se confirmó que la matanza estuvo a cargo del terrorista Hidebrando Pérez Huarancca, quien ordenó aniquilar a la población de Lucanamarca como “sanción ejemplar” por haberse rebelado ante ellos.
Por ello, el coordinador de Derechos Humanos Miguel Jugo, se expresó con profundo dolor sobre lo ocurrido aquel fatídico día. “Fue una situación terrible, atroz e increíble. Esto lo encabezó Abimael Guzmán y se creía que estaba en guerra. Sin embargo, cualquier situación que afectaba su línea, los consideraba enemigos. Y así fue, los campesinos reaccionaron ante los ataques de Sendero Luminoso y la historia posterior la sabemos”.
Finalmente, Jugo explicó el escenario de aquel entonces. “Creo que lo central fue una especie de poner orden en la zona. Era el elemento fundamental sobre la práctica violenta de Sendero. Ellos no decían que iban hacer las cosas del pueblo por una vía pacífica sino era a través del terror. Eso no fue una casualidad, fue pensada y aprobada en una sesión senderista”.
