El pontífice llegó el miércoles a la ciudad de Bogotá. Se quedará hasta el domingo 10 de setiembre en tierras colombianas.
(Foto: Radio Uno)
El papa Francisco congregó a más de 1,3 millones de personas en su primera misa campal de su viaje a Colombia y en la que hizo una defensa de la vida humana y advirtió de las tinieblas que amenazan el país.
«También aquí, como en otras partes, hay densas tinieblas que amenazan y destruyen la vida (…): las tinieblas de la sed de venganza y del odio que mancha con sangre humana las manos de quienes se toman la justicia por su cuenta», dijo el papa ante los fieles en el Parque Simón Bolívar de Bogotá.
Francisco fue recibido por un grupo de niños con discapacidades que le abrazaron y le acompañaron a la sacristía para que se colocara los paramentos para la celebración eucarística.
Francisco valoró «aquellos que han tomado iniciativas de paz, de vida» y entre ellos citó «quien trabaja en la defensa y en el cuidado de la vida humana, particularmente cuando es más frágil y vulnerable: en el seno materno, en la infancia, en la vejez, en las condiciones de discapacidad y en las situaciones de marginación social».
Al terminar la misa el arzobispo de Bogotá, el cardenal Rubén Salazar, aseguró que estas palabras del papa y esta misa fueron como bálsamo que «trae consuelo y paz» a un país que «sufre los embates de la muerte en múltiples maneras».
Cuando el pontífice salía del parque a bordo del papamóvil, el cielo bogotano se iluminó con el espectáculo multicolor que se prolongó por varios minutos, para dar paso luego a un concierto de artistas como el cantante de vallenato Jorge Celedón y el grupo ChocQuibTown, entre otros.
La multitud que acompañó al papa Francisco en su primera misa campal en Bogotá lo despidió con salvas de aplausos y cánticos.
El papa llegó el miércoles a Colombia donde permanecerá hasta el 10 de setiembre. La agenda oficial comenzó con su visita al palacio presidencial conocido como Casa de Nariño donde se reunió en privado con Santos, a quien ya recibió en dos ocasiones en audiencia en el Vaticano.
En su discurso durante la visita, el pontífice argentino urgió a los colombianos converger en una misma ruta para enfrentar los desafíos de la paz en una nación desgarrada por décadas de conflicto armado.
«Es mucho el tiempo pasado en el odio y la venganza… La soledad de estar siempre enfrentados ya se cuenta por décadas y huele a cien años”, dijo el pontífice argentino de 80 años aludiendo a la obra cumbre del fallecido Nobel colombiano. “No queremos que cualquier tipo de violencia restrinja o anule ni una vida más», manifestó.