Esta mañana, familiares y amigos le brindaron el último adiós a la pequeña Angélica María Gaspar (03), quien perdiera la vida el pasado lunes en un incendio que redujo a cenizas su precaria vivienda, ubicada en la Asociación "El Pacífico" en Calana.
Los restos mortuorios de la menor fueron trasladados desde el local comunal de Piedra Blanca hasta el Cementerio de Calana, en una caravana fúnebre acompañada de decenas de personas entre las que se encontraban sus progenitores, vecinos, amigos de la familia, el alcalde de la jurisdicción Juan Ramos Arocutipa, padres de de la institución educativa Piedra Blanca, y sus profesores.
Su docente y tutora, Carmen Rodríguez, la recordó como una niña muy alegre y tranquila, y una muy inquieta y empeñosa estudiante, pues a pesar de tener problemas al hablar, aprendía las lecciones con rapidez.
Asimismo, invocó a la comunidad en general a que ayuden a la familia Gaspar, ya que lo han perdido todo, no tienen útiles ni uniformes para reiniciar sus labores escolares, por lo que se está recibiendo este tipo de donaciones (y de otra índole como víveres y ropa) en el mismo plantel de Piedra Blanca, donde además momentáneamente están pernoctando.
Por su parte, el burgomaestre Ramos Arocutipa se comprometió a, junto a los padres de familia del colegio, construir una nueva vivienda para esta golpeada familia en el mismo terreno que ocupaba su choza.
Asimismo, desde la localidad tarateña de Ticaco, Jonathan Ríos, Director Regional de Defensa Civil, se comprometió a través del ilo telefónico a que a más tardar mañana por la mañana cristalizará la entrega de más ayuda para los Gaspar.