El ex procurador anticorrupción, comentó que nadie esperaba que el juez Carhuancho adelante la decisión de dictar prisión preventiva contra Keiko Fujimori.
Acá hay suficientes elementos de convicción.
Keiko Fujimori fue trasladada al Anexo de Mujeres del penal de Chorrillos, luego que el juez Richard Concepción Carhuancho acogiera el pedido del fiscal José Domingo Pérez, de 36 meses de prisión preventiva.
“Nadie esperaba la decisión del juez, adelantar la decisión respecto de Keiko Fujimori, pero es una decisión perfectamente licita y no hay algo indebido en su decisión”, comentó Julio Arbizu Gonzales, ex procurador anticorrupción de la república.
Dijo que existían suficientes elementos de convicción de los cuales el más importante era el peligro procesal.
“No hay ninguna duda de que estos chats, que el juez mencionó durante buena parte de su lectura de casi 7 horas, representan no solo el riesgo sino la certeza que se podía seguir perturbando la investigación del fiscal”.
Los estándares fijados por el Tribunal Constitucional a raíz del caso Ollanta Humala y Nadine Heredia, imponen la necesidad de una elevación de estándares en incidentes como la prisión preventiva.
“Quiere decir que -por ejemplo- en cuanto a elementos de convicción hay una exigencia de mucha más intensidad que en circunstancias normales que en una prisión preventiva y genera esa sensación de estar frente a una audiencia de juicio oral que cuya terminación dará lugar a una condena. Es pernicioso por la forma que es percibido por la opinión pública”, agregó.