Representantes de la asociación de cesantes de la UNJBG exigen al rector cumplir con sentencia consentida.
Rene Álvarez y Carlos Reynoso, integrantes de la asociación de cesantes de la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann (UNJBG)
Rene Álvarez y Carlos Reynoso, integrantes de la asociación de cesantes de la Universidad Nacional Jorge Basadre Grohmann (UNJBG), “representamos a un grupo de 20 a 25 docentes cesantes que iniciamos en 2010 una demanda de reclamos salariales a la universidad y el 2013 obtuvimos una sentencia consentida porque la universidad no apeló”, dijo Álvarez
“Sin embargo, a la fecha la universidad se está burlando permanentemente de la sentencia y no cumple mínimamente con el pago de la nueva pensión (…) desde 2013 a la fecha han pasado cinco años”, alegó el cesante.
Por su parte, Reynoso indicó que ante el incumplimiento conversaron con el rector Adilio Portella, pero éste les indicó que esto depende de los asesores legales y al día de hoy no tienen respuesta positiva.
“El señor Portella no conoce nada de aspectos jurídicos y mucho se confía en los asesores legales quienes dilatan posponen apelan y no cumplen con la disposición”, comentó Álvarez.
Acotaron que la casa superior de estudios mantiene una deuda que oscila entre los 900 a Un millón 200 soles por cada catedrático.
