El Fiscal José Peláez Bardales concluyó el alegato de la Fiscalía rectificando la pena de 30 años de prisión para Alberto Fujimori, en la sede de la DIROES.
Peláez Bardales pidió a Sala Penal Especial de la Corte Suprema condenar al ex mandatario por ejercer el máximo poder en una estructura de organización criminal y por los delitos de homicidio calificado, lesiones graves y secuestro: "Ello no significa un pedido de venganza sino un acto de justicia", enfatizó.
Luego, Peláez pidió investigar a Nicolás Hermoza Ríos, Alberto Pinto Cárdenas y Vladimiro Montesinos, por su participación en el secuestro del periodista Gustavo Gorriti, así como al General Willy Chirinos Chirinos por el delito de falso testimonio.
"El Fiscal ha expuesto un claro esquema de cómo es que se configura el delito de homicidio calificado, en tanto es la tipificación más grave y que correspondería en el caso Barrios Altos. Además se ha centrado también en los daños ocasionados a las víctimas, que no solamente son de carácter físico, sino también de carácter psicológico y moral, y fue claro en definir cómo en cada delito que se imputa a Fujimori encuadra dentro de la autoría mediata", señaló la doctora Gloria Cano, de la Asociación Pro Derechos Humanos, APRODEH.
"Ha sido un cierre contundente, muy sólido, que ha ratificado el pedido de la Fiscalía de 30 años en prisión para Fujimori y reparaciones para las víctimas. El fiscal ha sido claro en señalar que una sentencia condenatoria sería la base para la no repetición en un futuro de los mismos delitos. Ha sido importante que Peláez, como representante del Ministerio Público, haya hecho énfasis en que esta sentencia es un pedido de justicia de los familiares y de la sociedad, de justicia y no de venganza, por una sanción ejemplar a quien tuvo el dominio de todo un aparato de poder que ocasionó tánto daño al país", finalizó.
El lunes 2 de febrero la Doctora Gloria Cano iniciará la intervención de la parte civil en el llamado juicio histórico.
