Los peruanos, que residen en Cochabamba hace más de un año, aseguraron que luego de haber surtido una serie de inconvenientes para obtener su permiso de residencia en Bolivia para trabajar en la Zona Franca de Cochabamba, tuvieron que afrontar nuevas “trabas” para obtener su visa de residencia por dos años y los funcionarios de Migraciones de ese país les informaron que se les impondría una multa ascendente a $ 475 dólares americanos por concepto de trámites de cambio de domicilio, además $ 300 dólares americanos por derecho de trámite y $ 150 dólares por “papeleos”.
Los afectados además precisaron que tras haber recibido la información de la Oficina de Migraciones de Bolivia, decidieron acudir al Consulado Peruano en Cochabamba para ser asesorados y exponer el problema que afrontaban más de 700 personas residentes en la ciudad boliviana, sin embargo el Cónsul General del Perú en Cochabamba, Alfredo Antonio Tejeda Samamé sólo atinó a sugerirles que cumplieran con los requisitos que imponían las autoridades bolivianas, olvidando decirles si el monto que pretendían cobrarles, era o no justo.