Tras los recientes accidentes de buses interprovinciales en las carreteras del Perú, el ejecutivo propuso la aplicación de penas severas a los dueños de las empresas de transporte por no respetar la ley de tolerancia cero, que llegarían hasta la pena de cárcel , confiscándoles además sus herramientas de trabajo.
Así lo dio a conocer el presidente de la República Alan García Pérez indicando que no sólo los conductores son los causantes de estos fatales accidentes , sino también los propietarios de los ómnibus quienes no contentos con tener operativos unidades vehiculares en mal estado y que no cumplen con los requisitos establecidos; dan lecciones a sus empleados de cómo evadir los controles.
"A ver si así ,van a dejar de salir a trabajar con el ómnibus en mal estado o a ver si así van a estar jugando a eludir la garita de control, o contratar a choferes irresponsables y sin experiencia", expresó luego de inaugurar la segunda unidad de la Central Termo Eléctrica Chilca I.
Dijo que es muy lamentable que en nuestro país, "semidelincuentes" estén ocupando cualquier espacio que se deja abierto, burlando las disposiciones emanadas a fin de prevenir incidentes como este que traen como consecuencia dolorosas pérdidas humanas.
Igualmente, solicitó a los pasajeros que tomen las debidas precauciones del caso al momento de abordar los buses interprovinciales, teniendo en cuenta que las mismas se encuentren en buen estado y no permitiendo que los choferes se excedan de la velocidad permitida, para no poner en riesgo su integridad física.
Haciendo hincapié en que la responsabilidad de estas tragedias recae sobre todos los actores sociales, García Pérez aprovechó la oportunidad para señalar que el Plan de Tolerancia Cero debe ser revisado, remarcando que si las autoridades regionales no van a considerar la aplicación de controles en las vías del país para evitar el libre tránsito de unidades de transporte no aptas, su gobierno buscará recuperar la autoridad directa de fiscalizar los vehículos y las empresas a nivel nacional.
