El jefe de la oficina de la Defensoría del Pueblo en Tacna, Edward Vargas Valderrama, expresó su preocupación ante la presencia de población de Puno y Tarata en la zona de afectación del proyecto Vilavilani (provincia de Tarata). “Lamento que la población este ahí exponiendo su salud, exponiéndose a la pandemia. La Policía actuará porque están prohibidas las reuniones”.
Refirió que este es un conflicto latente pues no es la primera vez que los comuneros expresan su disconformidad con el proyecto hídrico que el Gobierno Regional de Tacna (GRT) pretende ejecutar en la zona. Para Valderrama “lo más conveniente es formalizar una mesa de diálogo con todos los actores que voluntariamente quieran conversar”.
Destacó que “cuando se hace una obra pública como esta el Estado exige comunicación con la población. Como Defensoría hemos pedido los expedientes de Vilavilani para ver si se cumplió con las etapas”.
Si bien es cierto existe una medida cautela que impide el reinicio de la obra, recordó que este tipo de recurso también es objeto de impugnación. En tal sentido solicitó al GRT informar si ganó la referida impugnación “porque con una medida cautelar no podrían hacer ningún tipo de acción”, acotó.
A decir del especialista, el GRT debió aprovechar esta medida para realizar una mesa de diálogo “no concluyente, pero sí para escuchar a las partes”.
🔴 #Urgente│Tarateños y puneños duermen en la zona desde el lunes 28 al advertir el reinicio de la obra pese a existir una medida cautelar que paraliza el proyecto tacneño. (FOTOS) @Defensoria_Peru @midagriperu @pcmperu @Poder_Judicial_ https://t.co/OiO7yuS08M
— radio uno (@radiouno_pe) June 29, 2021