Desde marzo de 2020 Tacna y Arica, dos ciudades hermanas, volvieron a estar separadas. Esta vez la causa fue la pandemia de la COVID-19.
El medio chileno Teletrece presentó este domingo un reportaje acerca de cómo es la vida en Arica y en Tacna durante este tiempo de fronteras cerradas. Muestra el contraste de la actualidad económica de las dos ciudades, donde a una le va mejor que a la otra.
“Ahora nosotros estamos ricos”, dijo para Teletrece el taxista chileno José Santa María consultado sobre la situación de Arica durante la pandemia.
Hasta antes del cierre de fronteras, Tacna era la principal alternativa de servicios de salud comercio y diversión para los ariqueños. En fechas festivas 40n mil personas cruzaban la frontera a diario, y 15 mil en días entre semana.
“Nuestra realidad con frontera cerrada, para nosotros ha sido favorable, de verdad favorable porque toda la plata se está quedando aquí”, declaró Verónica Segovia, presidenta del barrio comercial 7 de Junio al medio chileno.
Para el sector comercial de Arica, el incremento en sus ventas subió hasta en un 80%.
Sin embargo, aunque el comercio de Arica aumentó sus ingresos durante la pandemia, el gasto promedio que realizan es de alrededor de 30 mil pesos diarios por familias, en comparación a los 500 mil pesos que gastaban en Tacna.
Las mejoras de ingresos también se vieron reflejados en los servicios médicos a tal punto que a la fecha solo se pueden separar citas para la segunda semana de octubre.
El movimiento comercial de Arica contrasta con el panorama desolador de Tacna, donde no es difícil encontrar negocios cerrados y locales en venta. Incluso el presidente de los comerciantes de la Zofratacna, Isaac Chili, insistió al gobierno peruano la reapertura parcial de la frontera con Chile.