El Senado de Chile aprobó por unanimidad un proyecto de acuerdo para privilegiar la protección epidemiológica de la población de las regiones de Arica y Parinacota y de Tarapacá.
Cuando quedan pocos días para que el 1 de diciembre se abran las fronteras terrestres para todo tipo de vehículos, la Sala del Senado le solicitó al Presidente de Chile, Sebastián Piñera, que suspenda la apertura por los pasos de Chacalluta y Colchane, para privilegiar la protección epidemiológica de la población de las regiones de Arica y Parinacota y de Tarapacá.
Ello, a través de la aprobación de un proyecto de acuerdo presentado por los senadores Luz Ebensperger, José Miguel Durana, Carmen Gloria Aravena, Carolina Goic, Ximena Rincón, Claudio Alvarado, Juan Castro, Francisco Chahuán, Juan Antonio Coloma, Alfonso de Urresti, José García, José Migue Insulza, Carlos Montes, Iván Moreira, Alejandro Navarro, Manuel José Ossandón, Jorge Pizarro, Rafael Prohens, Kenneth Pugh, Rabindranath Quinteros, David Sandoval y Jorge Soria.
En lo fundamental, el proyecto de acuerdo plantea que se suspenda la apertura de fronteras en los citados pasos terrestres, hasta que se cumplan con algunas condiciones:
1.- Que se verifique que el nivel de vacunación en Perú y Bolivia alcance un nivel superior al 80% de personas inoculadas con dos dosis de la vacuna.
2.- Que se implementen mecanismos de verificación de la documentación destinada a acreditar las dosis de vacunación de las personas que leguen a Chile por los pasos terrestres de Chacalluta y Colchane.
3.- Que se encuentren plenamente vigentes los reglamentos derivados de la nueva Ley de Migraciones de Chile y esta se encuentre, en consecuencia, plenamente vigente.
4.- Que se encuentren plenamente vigentes los Convenios que deben suscribirse con Perú y Bolivia, destinados a regular la situación y flujos migratorios de los habitantes de zona fronteriza chilena.
FUNDAMENTOS
Los autores del proyecto de acuerdo señalan que, según la información pública entregada por diversos organismos internacionales, los niveles de vacunación en Perú y Bolivia, son aún bajos y los mecanismos de verificación de las personas vacunadas son poco confiables.
Agregan que «en el caso peruano, las personas vacunadas corresponden al 51,8% de la población, comprendiéndose en dicho porcentaje a las personas con dos dosis de vacunas» y que en el caso de Bolivia «ese porcentaje es aún peor, alcanzando el nivel de vacunación tan solo a un 33,83% con ambas dosis de vacunas».
Junto con señalar que «en ambos países aparece como lejana la aplicación de una tercera dosis de refuerzo», manifestaron que «la presión que la apertura de fronteras para los servicios de salud de las Regiones de Arica y Parinacota y de Tarapacá será muy alta, sobre todo que no se considera un mayor presupuesto, contratación de mayor personal ni dotación de nueva infraestructura para la prestación de los servicios de salud de dichas regiones».