Judith Machaca Cauna (20) y Nohemí F. E. L. (14) fueron halladas muertas en un pozo de 90 metros de profundidad el 9 de febrero de 2021 y si bien no hay nexo familiar ni amical entre ellas, ambas tienen en común haber sido «presa» del expolicía Santiago Paco Mamani, ahora en prisión preventiva junto a sus padres Jorge Alberto Paco Cabrera (55) y Nancy Marisol Mamani Huayhua (49), y ex esposa Diana Apaza Sayritupa.
Este 7 de noviembre desde las 3:00 p. m. los imputados serán llevados a juicio oral con pedido de cadena perpetua. De las diligencias se ha destacado que durante la búsqueda de Judith, malos agentes no quisieron en un inicio aceptar la denuncia por desaparición que Susana Cauna buscaba interponer en noviembre de 2020 e incluso ya en marcha el caso -junto a su esposo- era objeto de burla de los mismos policías.
Susana Cauna y Gabino Machaca exigieron justicia este lunes desde Radio Uno, recordando a la vez la odisea vivida y a quienes sí los ayudaron, entre ellos la sociedad unida a sus numerosas marchas, el abogado Miguel Díaz quien a la fecha lleva el caso de manera gratuita y la Multisectorial de Mujeres que para hoy ha convocado un plantón frente a la Corte Superior de Justicia desde las 2:30 p. m.
Fedra Rodríguez, representante del colectivo de mujeres, indicó desde Argentina que a Susana Cauna los policías le decían que «su hija se fue de parranda» reduciendo toda posibilidad de rápido accionar de búsqueda de una persona en potencial peligro de muerte.
De no ser por la persistencia de los padres de Judith, siendo la madre quien se plantaba en la comisaría abandonando su vida en busca de su hija, jamás hubieran sido hallados los cuerpos. Entonces, es para la activista, reprochable que «si tú no estás presente, no investigan».
Para Rodríguez, el caso también ha evidenciado una vez más una grave falencia en el sistema de justicia que, demoró 9 meses para autorizar el registro de los aparatos electrónicos (celular y laptop) de los imputados y víctima, permitiendo así que información sea modificada dado que Paco Mamani laboraba en la dependencia policial a la cual los padres de Judith acudían a diario insistiendo con la búsqueda. Aunado a ello, que el juez Yuri Maquera otorgara comparecencia para el expolicía quien aprovechó tal oportunidad para fugar a Bolivia siendo capturado diez meses después, paseando en un mercado de Santa Cruz junto a su nuevo compromiso.
Caso Judith y Nohemí: Expolicía y su familia no podrán evadir sentencia
