El hallazgo se registró cuando el hombre pasó su equipaje por la máquina de Rayos X y el fiscalizador aduanero detectó una imagen extraña.
La droga iba oculta en el respaldo de la mochila. (Foto: Aduana Chile)
El imputado trabajaba como chofer en Lima, Perú, y viajó vía terrestre hasta Tacna y de ahí debía entregar tres kilos y 205 gramos de cocaína a un contacto en el terminal Rodoviario de Arica.
El hallazgo se registró cuando el peruano pasó su equipaje por la máquina de Rayos X en Chacalluta y el fiscalizador aduanero detectó una imagen extraña, por lo cual se analizó con mayor detalle el equipaje. Al abrir la mochila el funcionario encontró que sólo había ropa de niña usada y entrevistó al extranjero, quien cayó en contradicciones y no supo dar coherencia al relato de su viaje.
Tras ello, se analizó el respaldo lumbar de la mochila encontrando una bolsa plástica que en su interior tenía un paquete envuelto en papel calco, el que a su vez contenía una especie de lámina sellada con la cocaína.
El cargamento supera los 20 millones de pesos en el mercado informal de la zona norte de Chile, cifra que se puede triplicar en Santiago y otras regiones.
De toda la situación se informó en forma inmediata al fiscal de turno del Ministerio Público, quien asignó las investigaciones posteriores a funcionarios de la Policia de Investigaciones (PDI).