Como cada año en su día central, miles llegaron al santuario del Señor de Locumba en busca de un milagro o agradecer uno ya cumplido. La misa fue oficiada por el Monseñor Marco Antonio Cortez Lara quien resaltó la importancia de la familia.
Intenso sol no fue impedimento para estar presente ante el Señor de Locumba. (Foto: Radio Uno)
A pie, en bicicletas, o en buses. Miles de fieles en una larga peregrinación desde Tacna o de diversas partes del país se reunieron esta mañana bajo un intenso sol en el Santuario del Señor de Locumba para conmemorar una de las más grandes fiestas de la fe católica. Reunidos alrededor de la Sagrada Imagen de Cristo Crucificado, miles de fieles cantaron, oraron, agradecieron y pidieron milagros para sus vidas.
Los fieles de este milagroso Señor de Locumba no solo son de la región de Tacna, sino también han llegado hasta la zona turistas nacionales y extranjeros que no les ha importado recorrer varios kilómetros con el afán de venerar esta santa imagen.
La plaza principal de villa Locumba permaneció abarrotada durante todo el día albergando a los feligreses que llegaron con profunda fe religiosa. Aunque claro está que no todo es religiosidad en la zona: junto a los peregrinos también han llegado cientos de comerciantes que aprovechan la ocasión para vender sus productos.
La misa central de festividad estuvo programada para las 10:00 horas siendo oficiada por el Monseñor Marco Antonio Cortez Lara, Obispo de la Diócesis de Tacna y Moquegua quien en su homilía resaltó el valor de la familia e hizo un llamado a la humildad.
Un lleno total en el Santuario en celebraciones previas propició que la Eucaristía central se llevara a cabo al frontis del templo, donde muchos fieles lograron participar.
