En la madrugada de este miércoles, una ola con sustancias desconocidas llegó a las orillas de Ilo y causó la muerte de varios peces. El criadero de corvinas de Miguel Torres, dirigente de pescadores artesanales no embarcados, también fue perjudicado.
El dirigente gremial acusó que no hubo comunicados por parte de la Gerencia Regional de la Producción ni de la oficina zonal del Instituto del Mar del Perú (Imarpe), que pudieran haber servido para prevenir la afectación de los pescadores no embarcados.
“Esto se veía venir hace más de 15 o 20 días, que estaba avisando en Chile. Esta semana también pasó en Tacna (…) Ahora han muerto las corvinas que estamos criando”, dijo.
Denunció, además, que el Imarpe no cuenta con los instrumentos necesarios para identificar los agentes contaminantes que causaron la muerte de las especies de la orilla.
“Nuestro guardián hizo el reporte a las 3 de la mañana y ahora está trayendo algunas muestras para hacer en Imarpe, y nos damos con la ingrata sorpresa que Imarpe no tiene la capacidad para hacer el estudio de qué han muerto estas corvinas. Dice que es Lima. Incluso no tienen instrumentos para ver la afloración de las aguas”, acusó.
Instó al Gobierno Regional de Moquegua la pronta intervención para evitar daños mayores en la localidad, dedicada en su mayoría a la actividad pesquera.
