En un acto de fervor y muestras de fe y devoción, el pueblo católico de la Diócesis de Tacna y Moquegua participó en la Consagración de la sede eclesiástica a la Virgen de la Candelaria, durante una ceremonia colmada por demostraciones de recogimiento y simbolismos marianos, en que personas provenientes de la región Tacna y Moquegua, dejaron de lado sus diferencias para unir sus plegarias por la consagración de la Diócesis a la Madre de Jesús.
Según el documento de Aparecida, redactado tras la V Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe, realizada entre el 13 y 31 de mayo del 2007, todos los obispos de América Latina, junto con el Papa Benedicto XVI, proponen las grandes líneas de trabajo pastoral de esta parte del continente, para lo cual comprometen a todas las diócesis del continente a consagrar su sedes a la Virgen María. A nivel nacional, esta ceremonia se realizó es pasado 30 de agosto en Chimbote.
La Diócesis de Tacna y Moquegua, sensible a los recientes acontecimientos que intentaron dividir ambos pueblos, determinó que la ceremonia central de Consagración se llevara a cabo en la I.E. N° 980- Daniel Becerra Ocampo de la Región Moquegua, hasta donde peregrinos provenientes de Tacna y otras regiones de la vecina provincia, se reunieron bajo una sola plegaria a la espera del arribo de la Sagrada Imagen de la Virgen de la Candelaria proveniente del santuario de Torata.
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La acción litúrgica, que estuvo presidida por Mons. Marco Antonio Cortez Lara y contó con la presencia de diversas autoridades regionales, se desarrolló bajo el lema "Para hacer lo que Él nos diga".A la llegada de la Santísima Imagen, los fieles la abarrotaron a su paso, elevando plegarias por su intersección ante el Señor.
