El imputado afronta los delitos de feminicidio y parricidio tras asesinar y quemar a su ex pareja y su hijo. El Juez acogió el pedido de prisión preventiva de 9 meses para este sujeto.
(Foto: Radio Uno)
“El juez del módulo del distrito Alto de la Alianza declaró fundado el requerimiento de prisión preventiva solicitado por el Ministerio Público al haber hallado suficientes elementos de convicción que vinculan gravemente al investigado”, manifestó el fiscal Wilber Carbajal sobre la audiencia realizada este lunes en contra de Aramis Edgar Luque Humpire (20), asesino confeso de su ex pareja Miriam Paco Iscara (22) y su hijo de 1 años y 3 meses.
Este sujeto afronta los delitos de parricidio y feminicidio por lo que pasará 9 meses en prisión mientras duren las investigaciones. Durante este tiempo, se continuará con la búsqueda de los restos óseos de la madre y su pequeño en el sector de Peschay. Al momento, los peritos encontraron un pequeño hueso que pertenecía a la pelvis de Miriam.
Así también se agilizará los resultados del examen de luminol practicado al vehículo de Aramis Luque y en la vivienda de este sujeto, asociación 28 de agosto frente al ovalo La Cultura, comité 9, Mz-384 Lt-8. En este lugar, Aramis –confesó- asesinó a su ex pareja y al pequeño empujándolos por la escalera para luego quemar los cuerpos a inmediaciones del cuartel Tarapacá y abandonarlos en un basural de Peschay.
“De alguna manera se está haciendo justicia del reclamo y la angustia que tenía en zozobra a la familia Paco Iscara, población y compañeros (as)”, indicó el abogado Néstor Pari.
Confirmó que la pareja del imputado, Miriam Juli Rojas, fue incluida en la denuncia y ahora se procederá a gestionar la inclusión de la hermana de este sujeto, Jesica Luque Humpire.
Fueron determinantes para el encierro de Aramis Luque, «las declaraciones de un testigo codificado y la confesión de parte del imputado, las diligencias de lumino en la casa y vehículo, declaraciones de compañeros y sobrina que coinciden. Ahora hay que realizar las llamadas que ocurrieron ese día que fueron hechas de un teléfono público cercado a la casa del imputado”.
Este sujeto “no mostró arrepentimiento que denote que los hechos narrados fueron circunstanciales, nos permiten concluir que está encubriendo a otras personas”, agregó.
