El número de muertos por el incendio de un hospital dedicado al tratamiento de pacientes aislados de covid-19 en la ciudad de Nasiriya, en el sur de Irak, aumentó a 92, según la agencia de noticias estatal iraquí, INA. Las primeras pesquisas indican que las llamas se iniciaron por la explosión de una bombona de oxígeno en el centro de salud, destinado a aislar a los pacientes infectados por el coronavirus.
Las instalaciones carecen de los sistemas de prevención de incendios más básicos, como detectores de humo o extintores. El presidente iraquí, Barham Saleh, afirmó en su cuenta de Twitter que «el desastre del hospital Al Husein, en la provincia de Di Qar, y previamente el del hospital Ibn al Jatib, en Bagdad, son resultado de la corrupción y la mala gestión que subestima la vida de los iraquíes e impide el desempeño de las instituciones».
El hospital de Al Jatib, en el sureste de la capital Bagdad, también fue víctima de la explosión de bombonas de oxígeno destinadas a los enfermos de covid-19, provocando otro gran incendio que causó la muerte de 82 personas y dejó más de un centenar de heridos.
Por su parte, el primer ministro iraquí, Mustafa al Kazemi, dijo que la tragedia muestra un «defecto estructural» en el sistema administrativo del país, puesto que «no se realiza un seguimiento ni una diagnosis de los errores, mientras que los ciudadanos se convierten en víctimas», según un comunicado de su oficina.
Precisamente, anoche, Al Kazemi, mantuvo una reunión de emergencia con varios miembros de su gabinete para abordar lo sucedido y poco después el director de Salud de la provincia de Di Qar, Sadam al Tawil, presentó su dimisión y el Gobierno provincial decretó tres días de luto. Asimismo, las autoridades iraquíes han abierto una investigación y el Tribunal de Investigación de Di Qar ha emitido órdenes de arresto contra trece empleados del departamento de Salud de la provincia, incluido su director, según informó INA.
Irak vive ahora un repunte de casos de covid-19 con 9.000 infecciones diarias reportadas oficialmente y con solo un 1% de su población vacunada.
(Con información de El Confidencial)