El representante de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (Onudd), Flavio Mirella, condenó hoy el secuestro de niños por parte del terrorismo y pidió «sanciones muy severas» para los responsables de estos hechos.
En ese sentido indicó que con esta práctica ilegal que ocurre en el Valle del Río Apurímac y Ene (VRAE), Sendero Luminoso viola las convenciones internacionales de derechos de los niños.
“Esta acción es totalmente condenable y está en contra de la Convención de los Derechos de los Niños, es deplorable utilizarlos para fines bélicos y para el narcotráfico”, declaró a la Agencia Andina.
El funcionario de las Naciones Unidas abogó, en ese sentido, por la necesidad de aplicar sanciones muy severas para los cabecillas terroristas y del narcotráfico por utilizar a niños en sus operaciones ilegales.
“Esta práctica debe estar sujeta a sanciones muy severas por haberles quitado a estos niños la oportunidad de una vida con educación y en paz”, puntualizó.
Lamentó que estos niños experimenten sentimientos de amedrentamiento al ser esclavizados por el narcoterrorismo.
Mirella mencionó que en la década de los ochenta, en Sudáfrica, los cabecillas de grupos terroristas utilizaban a niños, y por ello fueron juzgados y condenados en tribunales internacionales de justicia.
“Es un delito y existe un precedente concreto. El mensaje claro es que esto no puede permitirse”, manifestó.
Mirella saludó la voluntad política del gobierno del presidente Ollanta Humala de denunciar esta realidad y buscar el apoyo de la ciudadanía, para acabar con esta práctica que tiene esclavizados a muchos menores de edad.
“Romper con esta práctica es algo fundamental, a fin de marcar una pauta entre las comunidades, más aun cuando hay muchas familias que sufren al no saber dónde están sus niños”, agregó.
Fuente; Agencia Andina