Gran cantidad de personas llegó este miércoles hasta el vacunatorio del instituto Francisco de Paula Gonzales Vigil para recibir, en la mayoría de casos, su primera dosis contra la COVID-19. Sin embargo, en poco tiempo se acabaron las 600 vacunas disponibles, lo que generó frustración en las personas que llevaban hasta cinco horas esperando en la fila.
El anuncio de que se acabaron las vacunas generó molestia entre las personas que llegaron al único vacunatorio que atiende durante la tarde en la ciudad de Tacna.
Pero no fue el único problema. El requisito de contar con domicilio de Tacna en el DNI fue impedimento para que otras personas con domicilio consignado en otras regiones no tengan acceso a la vacuna. Esto generó una gresca entre este grupo y los que sí cumplían el requisito.
Al lugar llegó un contingente de policías de la comisaría del distrito Alto de la Alianza para restablecer el orden e impedir que las personas de la fila logren ingresar al vacunatorio a empujones. Las personas incluso intentaron agredir a los policías y al personal de salud.
Al cabo de algunos minutos de iniciado los problemas, representantes de la Defensoría del Pueblo llegaron al instituto Gonzales Vigil para entrevistarse con el personal de salud encargado de la jornada de vacunación para corroborar que no se haya vulnerado el derecho de las personas de recibir la vacuna.
Como se recuerda, para este miércoles estaba prevista en este vacunatorio la aplicación de primeras dosis de Pfizer para personas de 20 a más años de edad, así como segundas dosis de Pfizer.
