(Sam Pari Álvarez).- En lo que va del año el precio del trigo y de sus derivados ha sufrido un incremento considerable, este fenómeno no solo afecta a Perú sino que es un efecto global, un efecto producido por los biocombustibles.
¿Qué son los biocombustibles? Son el nombre que reciben los combustibles derivados de organismos recientemente vivos o sus desechos metabólicos, los mas usados son el bioetanol y el biodiesel, el primero se obtiene a partir de maíz, trigo, caña de azúcar o remolacha y el segundo se fabrica a partir de aceites vegetales, que pueden ser ya usados o sin usar. En este último caso se suele usar, soja.
¿Qué tiene que ver el biocombustible? con el alza internacional del trigo, la respuesta es mucho; la aparición en escena de un nuevo y nefasto elemento, un depredador hasta ahora desconocido de las cosechas del valioso cereal, se trata, del desvió de grandes cantidades de cereales hacia las plantas de fermentación, es decir las industrias que producen etanol a partir de granos como el maíz, trigo y centeno.
Se ha comenzado a producir un curioso efecto de competencia entre la producción de comida y la de biocombustibles, esta competencia ya esta comenzando a traer sus consecuencias, la primera es el alza generalizada de los alimentos recrudeciendo en el trigo.
En lo que va del año 109 millones de toneladas de trigo que debían alimentar a seres humanos hambrientos serán utilizados para la producción de etanol, en otras palabras que van a servir para llenar los tanques de combustibles de automóviles en lugar de saciar el hambre de niños, mujeres y ancianos del planeta.
En el cuadro de importaciones de Perú según los principales productos, encontramos que dentro de las 10 casillas mas importantes, tenemos 4 casillas que corresponden a productos que son utilizados en la fabricación de biocombustibles los cuales han sufrido un incremento, dicho incremento toca nuestros bolsillos cada día que las amas de casa acuden a los centros de abasto.
No sólo el trigo se ve afectado por esta competencia sino también los campos de cultivo de otros productos agrícolas, en los cuales se ha dejado de cultivar productos tradicionales por cultivos para biocombustible, al parecer la competencia entre la alimentación y la necesidad de combustibles ya tiene un virtual ganador y una cola de perdedores.
Este nuevo combustible a pesar de llevar el termino "BIO" no es el más beneficioso para el medio ambiente, debido a que muchos bosques tropicales del mundo están siendo talados para iniciar el cultivo de productos para la fabricación de biocombustibles.
Los países en el mundo entero, al igual que Perú, vienen desarrollando programas de compensación y paquetes económicos para paliar la crisis de alimentos que apenas muestra sus narices y tiene como principales actores a los miles de seres hambreados de esta economía globalizada.
