«El Ecuador con relativa calma ha tomado el mecanismo de muerte cruzada anunciada por el presidente Guillermo Lasso», informó el periodista Luis Alberto Gines a la vez de indicar que la Asamblea Nacional se encuentra militarizada. En tanto, refirió que el «movimiento correista» es el más próximo a organizarse para las próximas elecciones de agosto.
El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, decretó este miércoles 17 la disolución de la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, y solicitó la convocatoria de nuevas elecciones.
Esta decisión, utilizando un mecanismo constitucional conocido como «muerte cruzada», se produce en medio del juicio político iniciado en su contra por acusaciones de malversación de fondos públicos, algo que Lasso ha negado y calificado como una maniobra política para desbancarlo.
La «muerte cruzada» permite al jefe de Estado disolver la Asamblea Nacional en caso de tres escenarios: si considera que los legisladores están obstaculizando su capacidad para gobernar, por grave crisis política y conmoción interna, y -cuando a su juicio- el poder legislativo se arrogue funciones que no le competen.
En el decreto ejecutivo 741 firmado por el mandatario, se hace mención a la crisis política que atraviesa el país y, además, Lasso acusa a la Asamblea de «un afán de desestabilización contrario a la obligación de colaboración y coordinación entre entidades públicas y poderes del Estado».
Una vez que Lasso activa este mecanismo, el Consejo Nacional Electoral dispone de siete días para llamar a nuevas elecciones legislativas y presidenciales, las cuales deberán realizarse en un plazo máximo de 90 dás a partir de la convocatoria.