Buena noticia. El puma hallado en una vivienda y almacén de aceitunas en el distrito Gregorio Albarracín (provincia Tacna) el 18 de mayo actualmente se encuentra en el felinario del Bosque Municipal. Oliver, como se le ha bautizado cariñosamente por los cuidadores, fue sometido a análisis que establecieron que se trata de un animal silvestre lo que permitirá su liberación, fijada para los primeros días de junio, según confirmó el jefe del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (Serfor) de Tacna y Moquegua, Christian Riveros Arteaga.
«Oliver esta establece, los primeros días estaba confundido al nunca haber estado encerrado. Los análisis de fecas, piel, garras, y todo arroja que ha sido un animal silvestre nacido en zona andina y que por algún motivo ha bajado y acá a estado por unos días. Dentro de sus fecas se ha encontrado pelos, es decir el animal ha comido animales vivos y los pelos parecieran de zorro, conejos o de perros, que posiblemente estos días que ha estado cerca a la zona donde se le ha hallado haya comido. Y ya lo vamos a liberar, entre el primero y cinco de junio”, manifestó.
Solo esperan que se defina el tema de transporte pues el felino de aproximadamente 50 kilos requiere de una jaula especial fabricada de metal y madera con acolchamiento. Concretado ello, «será liberado en zona andina donde abunden vicuñas y venados que es alimento para él», dijo al mismo tiempo de indicar «que por estrategia y al existir caza ilegal, la liberación será cerca al área de conservación Vilacota – Maure (en la provincia de Tarata), donde no haya mucha comunidad porque tienen ganado y son perjudicados cuando el puma va tras su presa».
Monitoreo satelital
El puma Oliver será un colaborador activo en favor de los suyos pues portará «un collar con dispositivo para hacerle seguimiento satelital y poder evaluar cuál es su desplazamiento» lo que «va a servir de mucho para comprender el comportamiento de la especie» y a la vez de poder «alertar a comunidades cerca», anunció.
Los resultados darían explicación a cómo terminó en una zona urbana, pues si bien su área de desplazamiento es hasta los 3 mil metros sobre el nivel del mar y «las quebradas de Viñani (en Gregorio Albarracín) tienen conexión directa con el litoral, y cada vez más el hombre esta llegando a la parte de arriba, esta poniendo granjas e invasiones, pareciera que fuera el motivo», pero «se halló en un almacén de aceituna y a un costado había un ambiente de curanderismo» situación que la PNP investiga.